Moncho's Memories

Friday, April 20, 2007

Los Inicios





Un regalo para mis hijos, en el afan de darles
"una historia"... porque todo ser humano debe
tener la suya, de dónde viene... quién es...
sus raices... para así proyectarse en el futuro
con la frente en alto !!









capitulo 1.-

He decidido comenzar desde lo que conozco. A partir de los
relatos de mi madre, esos que guardo en mi mente hasta con el
timbre de su voz; y con el hermoso apoyo de fotografías que
heredé de varias fuentes y que hoy cuido con el celo del que ha
encontrado un tesoro, pero no descarto la posibilidad de buscar
indicios de los antepasados que falta encontrar. Tal vez un alma
más joven pueda eventualmente escudriñar en los libros del
registro civil y viajar en el tiempo hasta donde dichos certificados
puedan permitirle. Eso daría mucha veracidad a esta historia.
El Viejo Larenas fue la “oveja negra” de una familia
acomodada de la zona central sur de Chile. De hecho existió en el
sur , en las Cercanías de Nueva Imperial, Temuco, un lugar
llamado el Valle de los Larenas, cerca de Lohualgüe, en el cruce
de dos caminos.
Pero ese Viejo roble, de sangre española y de alta alcurnia,
no soportó la presión social y prefirió vagar por los campos,
llevando una vida de lujuria y places mundanos. Contaba mi
madre que su abuelo entraba a las casas de pecado de a caballo y
sacaba a las “chinas”, como llamaban en esa época a las
prostitutas, de las trenzas para llevárselas ... decían que era el
mismo diablo.
Pero algo bueno había en su alma, ya que tenía una hija que
guardaba con celo y cariño, en la cuna de un hogar sin madre.
Como decía la costumbre de aquellos tiempos, decidió
casarla con un hombre de bien y así apareció en escena Don
Daniel Godoy Gutiérrez, un hombre ya en sus años maduros, pero
trabajador, con claros rasgos de sus raíces de Indio Araucano,
según se aprecia en las fotografías de este álbum, y que mi madre
siempre resaltaba con orgullo. Pero este Larenas, que había
desafiado abiertamente a su familia de descendientes Españoles
pudientes, encontró gran placer en mezclar la estirpe que con
tanto celo cuidaban sus parientes. Y así fue como se programó el
casorio, aun cuando la niña Aurora no tenía edad para
“matrimoneo”.
El acuerdo nupcial decía que no se llevaría la niña hasta que
ella tuviera edad suficiente. Eso, para cuidar la niña, según decía
el viejo Larenas. Sólo visitas autorizadas y el firme acuerdo de
entregársela cuando cumpliera los 16, edad suficiente para dar
hijos y formar una familia.
Se veía al marido que por las tardes venía a ver a su esposa,
pero siendo ella todavía una niña, la encontraba jugando en la
calle con otras niñas de su edad. Tomó la decisión entonces de
comprarle una máquina de cocer , como una forma de que usara
mejor su tiempo y alejarla de las malas influencias de la calle. Fue
así que después ya no la encontraba jugando en la calle, sino en la
casa con varias amigas de su edad, confeccionando ropas para sus
muñecas.
En algún momento, más temprano que tarde, presumía mi
madre, se concreto la entrega y comenzó para Doña Aurora una
vida de preñeces y pariciones de nunca acabar hasta su muerte,
cuando mi madre tenía solo 3 años.
Lo concreto es que del matrimonio de Don Daniel Godoy
Gutiérrez y Doña Aurora Larenas nacieron doce hijos, de los
cuales vivieron hasta ser adultos solo siete. Yo conocí a cinco de
ellos, mis contemporáneos. Con ellos de alguna manera partió mi
existencia y ellos fueron quienes de una u otra forma dejaron
huellas en mi forma de ser.
Entre los que vivieron, nombramos a Santiago, Daniel, Pedro,
María, Mercedes, Teresita y José, por orden de edad.

Mi Historia....


Un humilde aporte de Ramón Godoy,
en honor a mi Madre: Teresa de Jesús
Godoy Larenas, quién fue capaz de hacer de
mi un hombre de bien y un profesional a
pesar de todas sus limitaciones. Todo el
amor y mis recuerdos para ella. R.I.P.






Nací Bastardo... en casa ajena y con una familia prestada,
como muchos hijos de este país que quedamos sembrados como
migas de pan tiradas al suelo a lo lardo de nuestra tierra. Llegué
junto a mi madre, al principio para fregarle la vida, porque la
echaron de todos lados, la trataron de puta, de suelta, de
cualquiera, luego serví para preocuparla y darle el sentido de
familia que todo ser necesita; y por último, para acompañarla
hasta el día de su muerte.
La ausencia de un padre marcó mi vida en muchos
aspectos. Es una espina que clava el alma a lo lardo de todo
nuestra existencia... aun cuando mi madre encontró mil maneras
de realzar las cosas buenas de mi vida y lo afortunado que fui al
nacer y ser hijo de Dios. En eso tenía razón.... nacer fue lo mejor
que me paso, y esencialmente haber nacido de su vientre,
independiente de lo frustrante que haya sido ser negado por un
padre siempre y absolutamente ausente. Eso me hace más digno y
orgulloso de ser un Godoy....sólo Godoy... a secas. La sociedad
me exigió repetirlo como una irónica marca que grita al mundo
que fui negado... ¡Que bueno!, porque son pocos los hijos que
pueden honrar a su madre. Y qué mejor forma que esta....
llevando su apellido dos veces, ¡y con orgullo!.

La sociedad marca a los hijos de la ingenuidad femenina
como culpables de pecados ajenos... como niños sin historia...
“Hijos Naturales”, nos nominan.... tal vez para tapar tanta mentira
artificial que la religión y la cultura ha ido tatuando en las mentes
de sus feligresas. Hasta hace poco estampaban un timbre azulino
y manchado sobre el Certificado de Nacimiento, para que no
quedara ninguna duda que el portador no provenía de un “hogar
honorable”, dándole así a la cama la calidad de barómetro de la
honorabilidad de las personas.
Hoy suelto a correr estas palabras para dejar a mis hijos una
historia... la historia de su Padre... ese que los ha amado tanto y
quien ha sido inmensamente feliz gracias a ellos... porque sin
quererlo siquiera, con el simple hecho de nacer y existir... han
dado a este hombre el hogar y la familia que siempre esperó en su
infancia y con la que coexistió en la fantasías de todos sus juegos
y sueños de niño; que recibió como la mejor bendición que Dios
le dio.